Ansiedad y depresión

Ansiedad y depresión

Ansiedad y depresión

Ansiedad y depresión. Mucha gente, a veces, se siente ansiosa o deprimida. Estar pasando por un divorcio, la pérdida de un ser querido, ser despedido de un trabajo, y otras situaciones difíciles pueden llevar a una persona a sentirse solo, asustado, triste, ansioso o nervioso. Todos estos sentimientos son reacciones normales a las situaciones estresantes de la vida. Por lo tanto, algunas personas experimentan esos sentimientos a diario o casi a diario sin ningún aparente motivo, lo que hace difícil continuar con un funcionamiento cotidiano y normal. Estas personas pueden tener un trastorno de depresión, ansiedad, o bien ambos a la vez. Ansiedad y depresión

Cuando existen ambas que se debe hacer

Generalmente no es raro que una persona con un trastorno de depresión también sufra de ansiedad o viceversa. Cerca de la mitad de los diagnosticados con ansiedad también son diagnosticados con un trastorno de depresión. Una gran noticia es que este tipo de trastornos son tratables juntos o por separado.

La ansiedad y sus trastornos

En la ansiedad, los trastornos, son un grupo único de enfermedades caracterizados irracionales, persistentes, y la incontrolable ansiedad. Todos estos trastornos incluyen el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC), trastorno de estrés postraumático (TEPT), trastorno de ansiedad generalizada (TAG), las fobias específicas y trastorno de ansiedad social. Ansiedad y depresión

La depresión

Esta es una condición en la que un individuo se siente sin esperanza, desinteresado en la vida en general, triste, desanimado o sin motivación. Todos estos sentimientos cuando persisten un período corto de tiempo, suele ser un caso de “bajos ánimos”. No así cuando estos sentimientos se prolongan por más de dos semanas y cuando los sentimientos interfieren con las actividades diarias tales como pasar tiempo con amigos, cuidar a la familia, o ir a la escuela o al trabajo, es probable que se trate de un episodio depresivo mayor. Esta es una enfermedad tratable que afecta el modo en que una persona funciona, se comporta, piensa y siente. En el tiempo, en cualquier punto, de tres a cinco por ciento de personas sufren de depresión mayor, es del diecisiete por ciento el riesgo de por vida. Ansiedad y depresión

En un episodio depresivo mayor, los síntomas serían:

Pérdida de interés o placer en pasatiempos y actividades, incluyendo el sexo
Sentimientos de desesperanza, pesimismo
Inquietud, irritabilidad
Insomnio, despertarse muy temprano o dormir demasiado
Disminución de energía, fatiga, sentirse "decaído"
Tristeza persistente, ansiedad o "vacío"
Sentimientos de culpa, inutilidad, impotencia
Dificultad para concentrarse, recordar, tomar decisiones
Pensamientos de muerte o suicidio, intentos de suicidio
La falta de apetito y pérdida de peso o comer demasiado y aumentar de peso
Síntomas físicos constantes que no responden al tratamiento tales como trastornos digestivos, dolores de cabeza y dolor para los que ninguna otra causa puede ser diagnosticada por el profesional.

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